7 de noviembre de 2018

TESTIMONIOS



SANDRA

Sandra es una joven de 26 años quien asiste a los grupos de ayuda desde hace seis meses. Cuenta que estas fechas no le gustan porque la hacen sentir muy triste y sin ganas de hacer algo.

Ya que hace cuatro años su hermano falleció por una pelea que tuvo con un grupo que distribuía droga en la zona del centro. Este evento la llevó a caer en el consumo excesivo de alcohol, porque su hermano era “su pilar y su mejor amigo”. Sus padres la corrieron de su hogar porque no querían a una “borracha” en la familia y no querían ver que ella se hacía daño como su hermano, así que ella se fue de la casa a compartir renta con una de sus amigas quien le brindó su apoyo, por la situación que Sandra pasaba y tenía un trabajo estable en una bisutería, el cual perdió por su adicción; menciona que había días que llegaba “cruda” y su jefa al principio la regañaba y le descontaba días de pago y conforme pasaron los meses la corrió y no le pagó nada.

Al no tener dinero para pagar la renta fue teniendo peleas constantes con su amiga, -Sandra dice: “a ella le debo muchas cosas, le debo que no me dejo sola tras la muerte de mi hermano y me apoyó cuando me salí de la casa de mis papás y me apoyó cuando no tenía dinero para pagar mi parte de la renta y muchas veces me prestó dinero para comprarme alcohol y en el momento yo no vi nada de eso ya que mi adicción y mi tristeza me cegaron y fui muy grosera con ella, al final pelamos y no he vuelto a saber nada de ella, me arrepiento de todo lo que hice y quisiera buscarla para pedirle perdón pero ahora no sé dónde puedo encontrarla”.

Cuenta que cuando su amiga se hartó de mantenerla la corrió del lugar, para esto ya habían pasado más de dos años, y al otro día cuando su amiga fue a trabajar, ella le robo el dinero que tenía guardado y se fue, ese dinero se lo gasto en alcohol y se quedó en la calle. Menciona que no se acuerda de la mayoría de las cosas que hizo ese año, hasta que una amiga que tenía de la infancia la encontró y la llevó a un hospital para que le curaran sus múltiples heridas, cuando salió del hospital, la llevó a su casa y la apoyó para que saliera adelante, fue hasta ese momento en que ella decidió asistir a los grupos de apoyo y dejar de tomar por su propia mano, después consigue un trabajo de vendedora en una tienda, vive sola en un pequeño departamento y no ha vuelto a tener contacto con su familia. 

Ella dice que empezó desde cero y quiere rehacer su vida, tiene muy presente a su hermano y dice que por él va a esforzarse para ser mejor persona.



JULIAN

Julián es un señor de 50 años quien es alcohólico desde hace 15 años, asiste al grupo de apoyo desde hace 8 años.

Él es muy reservado con su historia, así que solo me quiso decir que en los años que consumió excesivamente alcohol perdió a su familia, es decir, su esposa se llevó a sus hijas y lo abandonó, era contador en una oficina y lo despidieron por presentarse borracho, cuando decidió dejar de tomar, su esposa le pidió el divorcio y este recayó en el consumo, una de sus hijas años después se contactó con él y este decidió dejar su adicción para recuperarse y reconciliarse con sus hijas pero hasta ahora solo tiene contacto con una y la otra no lo quiere ver ya que no lo considera necesario.

El menciona que quiere ver a su otra hija y platicar pero quiere darle su espacio y tiempo para que ella decida cuándo es el tiempo ideal para verla.






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