Bien
sabemos que la adicción se refiere al hábito de consumir cualquier sustancia
adictiva, al grado de crear una dependencia física y psicológica y que a su vez
va deteriorando nuestras relaciones sociales, nuestra mente y cuerpo.
Así,
el cerebro es un órgano que sufre grandes daños con el uso de drogas, como la
pérdida progresiva de la memoria, la pérdida de reflejos, la capacidad de
reacción y respuesta a los estímulos del ambiente, sin contar con la
dependencia psicología, física y emocional de consumir.
Por
otro lado la plasticidad se refiere a la capacidad de adaptación
del cerebro ante los cambios internos y externos producidos por el medio
ambiente o diversos tipos de lesiones, minimizando o contrarrestando los
efectos causados por dichas lesiones, haciendo que además el sistema nervioso central responda
evolucionando ante los daños.
En
el caso del consumo de drogas y el daño provocado al cerebro, la mayoría de los
cerebros de los consumidores les permiten adaptarse biológicamente y
contrarrestar los efectos de las drogas para recuperar un LTD normal. En los
adictos esta falta de plasticidad les deja sin defensas, de modo que la
adicción en parte proviene de la falta de plasticidad, es decir, de la
incapacidad de las personas adictas a contrarrestar las modificaciones
patológicas causadas por la droga en todos los usuarios.
“La exposición crónica a las drogas causa muchas modificaciones en la estructura y funcionamiento del cerebro, pero ¿Cuál de estas modificaciones es responsable del desarrollo de una adicción?
“La exposición crónica a las drogas causa muchas modificaciones en la estructura y funcionamiento del cerebro, pero ¿Cuál de estas modificaciones es responsable del desarrollo de una adicción?
Alguna
vez te has preguntado ¿Porque algunas personas son más vulnerables al consumo
de drogas que otras personas? O ¿Por qué para unas personas es más fácil dejar
de consumir drogas que para otras?
Pues según varias investigaciones, la falta de plasticidad
cerebral varía entre cada persona y en algunas es más desarrolla que en otras,
por lo cual algunas personas responden de manera más positiva al ingerir alguna
droga, ya que su cerebro neutraliza, normaliza o contrarresta el daño producido
al ingerir la sustancia.
“Sin esta forma de plasticidad, que
permite la ocurrencia de nuevos aprendizajes, el comportamiento respecto a la
droga se vuelve más y más rígido, abriendo la puerta al desarrollo de un
consumo compulsivo. El cerebro de la mayoría de los usuarios es capaz de
producir una adaptación biológica que permite contrarrestar los efectos de la
droga y recuperar un DLP normal. Por el contrario, la falta de plasticidad que
presentan los adictos, les deja sin defensas y por lo tanto el déficit de DLP
provocado por la droga se vuelve crónica. Este caso de ausencia permanente de
plasticidad sináptica, explicaría por qué el comportamiento de búsqueda de
drogas se vuelve resistente a las limitaciones medioambientales (dificultad en
la adquisición de la sustancia, consecuencias negativas para la salud y en la
vida social por tomar la droga, etc), y por lo tanto, más y más compulsiva.
Gradualmente, el control sobre la toma de droga se pierde y aparece la
adicción.”
Referencia:
Recuperado el 8-Diciembre-2014 en: ScienceDaily.com, 25/06/2010
INSERM (Institut national de la santé et de la recherche médicale), via EurekAlert!. - See more at: http://bitnavegante.blogspot.mx/2010/06/adiccion-una-perdida-de-la-plasticidad.html#sthash.O1ZmH4g8.dpuf
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